Fragmento del parlamento final de la Numancia, tragedia de Cervantes (1582):

que yo, que soy la Fama pregonera,
tendré cuidado, en cuanto el alto cielo
moviere el paso en la subida esfera,
dando fuerza y vigor al bajo suelo,
de publicar con lengua verdadera, (2420)
con justo intento y presuroso vuelo,
el valor de Numancia, único y solo,
de Batro a Tile y de uno al otro polo.
Indicio ha dado esta no vista hazaña
del valor que en los siglos venideros (2425)
tendrán los hijos de la fuerte España,
hijos de tales padres herederos.
No de la muerte la feroz guadaña,
ni los cursos de tiempos, tan ligeros,
harán que de Numancia yo no cante (2430)
el fuerte brazo y ánimo constante.
Hallo sola en Numancia todo cuanto
debe con justo título cantarse,
y lo que puede dar materia al canto
para poder mil siglos ocuparse: (2435)
la fuerza no vencida, el valor tanto,
dino de en prosa y verso celebrarse;
mas, pues de esto se encarga mi memoria,
dése feliz remate a nuestra historia.